Francisco Mora Soto, un apasionado ciclista de 34 años, ejemplo de resiliencia y amor por el deporte en la comuna de Pitrufquén. Ingeniero agrícola de profesión, Francisco ha estado montando bicicleta desde los 17 años, explorando diversas modalidades como street, park y cross country, para finalmente enfocarse en el descenso y enduro MTB.
Desde pequeño, Francisco sintió una profunda conexión con las bicicletas. “Siempre me ha encantado la bicicleta; es mi forma de vida”, comenta. Inspirado por videos de otros países, como los de la serie “New World Disorder”, comenzó a imitar a sus ídolos a su propio nivel. Con perseverancia, fue ahorrando para armar su bicicleta soñada, una pasión que lo ha acompañado hasta la actualidad.
Sin embargo, su camino no ha estado exento de dificultades. Hace aproximadamente tres años, Francisco fue diagnosticado con una enfermedad renal que lo llevó a comenzar un tratamiento de diálisis de por vida. “Ha sido difícil enfrentar esta situación; me afectó física y psicológicamente”, confiesa. A pesar de las operaciones y el tiempo que tuvo que pasar en reposo, nunca se rindió. “La bicicleta siempre ha sido mi escape; incluso cuando no podía andar, nunca dejé de soñar con volver”, añade.
Con la ayuda de una bicicleta eléctrica (e-Bike), encontró una nueva forma de disfrutar del ciclismo sin sacrificar su salud. “Ahora puedo seguir montando y disfrutando del deporte que amo. Me atrevería a decir que soy el único en Chile que compite en bicicleta y se dializa”, destaca con orgullo.
A lo largo de su carrera deportiva, Francisco ha cosechado varios logros. Ha estado en múltiples ocasiones dentro del top 10 en su categoría y logró un primer lugar en cross country. Recientemente, obtuvo el tercer lugar en la categoría e-Bike en el campeonato zona sur de descenso en Loncoche y el segundo lugar en el campeonato regional en Temuco, en el parque Pumalal.
Actualmente, se está preparando intensamente para el Huilo Huilo Outdoor Experience, un evento de enduro que se llevará a cabo en enero de 2025. Francisco competirá en la categoría e-Bike y está ansioso por demostrar su dedicación y amor por el ciclismo. “He entrenado mucho estos meses; quiero dar lo mejor de mí en esta competencia”, dice con determinación.
“Cuando ando en bici, uno se desconecta del mundo; elimina estrés y disfruta cada pedaleada”, comparte Francisco sobre sus entrenamientos. Para él, el ciclismo significa todo; es parte esencial de su vida diaria. “Si no es para hacer deporte, uso mi bici para transportarme. Es mi forma favorita de moverme”, explica.
Además, ha inculcado esta pasión en su hijo, quien a sus ocho años ya ha comenzado a competir. “Me llena de orgullo ver cómo mi hijo disfruta del ciclismo tanto como yo; tiene las oportunidades que yo no tuve cuando era niño”, menciona con emoción.
Las metas deportivas de Francisco son simples pero significativas: continuar montando con su hijo. “Las carreras son emocionantes, pero lo más importante para mí es disfrutar cada momento sobre la bici junto a mi hijo. Las carreras me gustan pero no son mi foco, si hay alguna que me interesa me inscribo, pero ya con solo poder pedalear todos los días soy feliz”, concluye.