Equipos portátiles permiten la reincorporación de los usuarios en sus actividades de la vida diaria de forma progresiva.
Apoyar la rehabilitación de los usuarios a través de un trato humanizado, cercano y sensible son parte de los valores del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital de Pitrufquén, que mediante un equipo multidisciplinario de 20 profesionales, trabajan en coordinación con las unidades hospitalarias para garantizar la reinserción de los pacientes en su ambiente físico, social y cultural.
De esta forma, profesionales de kinesiología, fonoaudiología y terapia ocupacional, buscan aportar en la recuperación de los pacientes que se encuentran hospitalizados en camas médico-quirúrgicas como en la Unidad de Pacientes Críticos, a través de equipos portátiles como una camilla que apoya la bipedestación estática y la MOTOMED, que apoya la terapia de entrenamiento motor en personas con restricción del movimiento.
Al respecto, la terapeuta ocupacional Camila Díaz, señaló que cada uno de estos equipos “favorece la reincorporación de los usuarios en sus actividades de la vida diaria de forma paulatina, apoya su motivación de rehabilitación al presenciar logros, previene complicaciones secundarias como lesiones por presión o de inmovilización precoz, favorece la prevención de delirio intrahospitalario, nos ayuda a la preparación del alta, contribuye a menos días de cama y hospitalización, menor carga a cuidadores o red de apoyo”.
Camilla bipedestación estática
La camilla que apoya la bipedestación estática, es un equipamiento que cuenta con un sistema de verticalización para trabajar en bípedo de manera asistida, y que durante el primer año de la pandemia debió suspender su uso. Sin embargo, ya se encuentra al servicio de pacientes que presentan daño neurológico adquirido o dificultad en la presión ortostática producida por estadías prolongadas en cama.
MOTOMED
Por otro lado, la unidad de rehabilitación del hospital del nodo sur cuenta con el equipo MOTOMED, que permite apoyar la terapia de entrenamiento motor en personas con restricción del movimiento, debido a que cuenta con modos de entrenamiento pasivo y activos por el paciente, tanto en cama o sedente y para miembros superiores e inferiores.
“Estos equipos portátiles, permiten complementar el trabajo del equipo de rehabilitaciones en personas hospitalizadas tanto en medicina como UPC, ayudando a una recuperación mucho más seguro y efectiva de los usuarios que presentan diferentes tipos de daños”, enfatizó la profesional Camila Díaz.
Atención transversal
Cabe destacar que el equipo multidisciplinario de este servicio distribuye sus labores en atención cerrada y abierta, mediante la atención de fonoaudiología, kinesiología y de terapia ocupacional, trabajando en tripletas o en red para el caso de derivaciones, donde se abordan patologías agudas y subagudas que requieren manejo de rehabilitación.
Entre ellos, se encuentran pacientes con ventilación mecánica, traqueostomizados o con síndrome de debilidad adquirida, daños neurológicos derivados de un accidente cerebro vascular, lesiones medulares, alteraciones traumatológicas como fracturas, amputaciones, pie diabético, alteraciones cardíacas, entre otras.
