
En Villarrica se realizó la jornada “Sexualidad y Discapacidad: Hablemos sin Tabúes”, espacio destinado a promover la inclusión, el respeto y la educación sexual adaptada a las distintas realidades de las personas con discapacidad en sus distintos tipos, tomando en cuenta a personas neurodivergentes. La jornada reunió a personas con discapacidad, cuidadores, profesionales de la educación y la salud y la comunidad en general.
La actividad tuvo como propósito derribar los mitos y tabúes asociados a la sexualidad de las personas con discapacidad, un tema que, según los organizadores, pocas veces se aborda abiertamente y que requiere de información y acompañamiento adecuado para las familias y los equipos de trabajo.
Entre las expositoras destacó la participación de Cecilia Morovic, comunicadora social y activista por los derechos de las personas con discapacidad, quien compartió su experiencia y reflexiones en torno a la temática. “El día de hoy vamos a hablar de un tema que es un poco complicado para alguna gente, que es sexualidad y discapacidad. Hice un proyecto durante la pandemia con un equipo de la Universidad de Chile, que se llama Sexualidad y Discapacidad. Tenemos unos videos que los vamos a analizar con la gente y luego vamos a repasar las grandes dudas sobre algunos temas. Yo creo que lo importante es derribar tabúes, que hay muchos con respecto a las personas con discapacidad y al tema sexual, tanto para ellas como para sus familias”, señaló Cecilia Morovic.
Durante la jornada, la expositora abordó temáticas como la hipersexualidad, la esterilización y la infantilización, problemáticas que aún afectan a este grupo de la población.
Por su parte, la terapeuta ocupacional Miriam Quezada, centró su exposición en los cambios entre la adolescencia y la adultez en personas dentro de la neurodivergencia. “El objetivo principal era abordar la importancia de educar en sexualidad a personas neurodivergentes, en todos los ciclos vitales, desde la infancia, hablando de sus principales desafíos en la adolescencia y la adultez. Lo más importante para mí es que se entienda que hablar de sexualidad es fundamental a cualquier edad: en niños, adolescentes y adultos. Nunca es tarde y debe enseñarse de maneras adaptadas y concretas, para que las personas neurodivergentes reciban de la mejor manera esta información, y sobre todo, que se hable del consentimiento, que es lo más importante”, expresó terapeuta.