- Escrito por una de sus hijas, María Paz Vial; una hermana, Elena Vial y un discípulo, Álvaro Góngora, el libro muestra lo más profundo del pensamiento que sostenía el abogado, periodista, político e historiador sobre Chile. Crítico en materia de desigualdad y amante de la historia, el fallecido exministro de Educación dividió su corazón entre el derecho y el periodismo, algo que logró concretar al convertirse en uno de los mejores columnistas de los medios escritos del país.
Gonzalo Vial Correa, fue un hombre que entregó su alma al país desde todos los frentes donde en algún momento estuvo. Abogado de profesión, el cuarto de seis hermanos también logró posicionarse como uno de los historiadores más importantes del país y sacó desde el fondo de su corazón su lado más periodístico al ser columnista de distintos medios de comunicación.
A través de Ediciones USS, la familia comparte la pasión que tuvo Gonzalo Vial al momento de educar, escribir y opinar. Junto a su esposa, María Luisa Vial, decidieron impulsar un proyecto educativo que hasta el día de hoy funciona y ayuda a niños en su formación, la Fundación Educacional Barnechea.
Álvaro Góngora, un acérrimo seguidor del abogado junto Elena Vial y María Paz Vial, decidieron traspasar las más profundas vivencias y anécdotas de Gonzalo Vial a un libro, que ya está a la venta en Ediciones USS y librerías del país, ofreciéndole al lector una visión íntima del que fuera ministro de Educación entre 1978 y 1979.
Como ministro de Estado impulsó importantes hitos, entre los que se destacan, la creación del Premio Nacional de Educación, las instrucciones para reformar los tres niveles de enseñanza y el proyecto de ley para que los académicos tuvieran la oportunidad de elegir a las autoridades de la educación superior.
Pero un año antes de asumir la cartera de Educación, él junto a su esposa, dan inicio a una importante iniciativa. Y es que María Luisa y Gonzalo, recordado por su familia como una persona carismática y positiva, no podían quedar de brazos cruzados viendo a tantos niños sin la posibilidad de educación, viviendo en situaciones complejas y sin la posibilidad de formar su futuro. Por lo que, con esa vocación de servicio, deciden crear la Fundación Educacional Barnechea en 1977 inaugurando el Colegio de niñas, Nuestra Señora de Loreto, ubicado en calle Garrido.
Un historiador haciendo historia
A los 19 años, Gonzalo Vial comienza a escribir historia impulsado por su mentor, el historiador Jaime Eyzaguirre en el Instituto de Historia de la Pontificia Universidad Católica. Incluso su memoria de grado, “El africano negro en el Reino de Chile”, fue publicado como libro y fue el primero de unos 20 volúmenes.
Sus aptitudes y competencias lo catapultaron para que fuera invitado a formar parte de la Academia Chilena de la Historia, convirtiéndose en ese momento, en uno de los integrantes más jóvenes con tan solo 35 años.
Su pasión por la historia lo llevó a seguir escribiendo artículos y reseñas. La inspiración la encontraba en las páginas de los libros de historia que constantemente leía o revistas académicas que abordaban temáticas que se adaptaban a los gustos de Gonzalo Vial.
Dentro de sus creaciones literarias, destacan los cinco volúmenes de la “Historia de Chile 1891-1973” y “Chile, Cinco siglos de historia”, compuesto de dos tomos.
El humanismo cristiano, la justicia y la desigualdad, lo que movía la pasión del columnista
Dentro de sus tantas labores; abogado e historiador, Gonzalo Vial dedicó un importante porcentaje de su vida a ejercer periodismo, específicamente siendo columnista de importantes revistas como Portada, Qué Pasa y del diario La Segunda, donde tenía el espacio para ser un acérrimo crítico de las desigualdades y las injusticias.
Cabe recordar que Gonzalo Vial, formó parte del Consejo de Defensa Del Estado, labor que más satisfacción le dio desde el ámbito del derecho. Fue convocado durante el gobierno del expresidente Patricio Aylwin para que se uniera a la Comisión Nacional de Justicia, Verdad y Reconciliación, mientras que el expresidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle lo invitó a ser miembro de la “Mesa de Diálogo”.
Su papel como columnista de La Segunda, Portada y Qué Pasa (en estas últimas fue fundador, columnista y a posterior director) fue utilizado para dar a conocer sin tapujos sus opiniones en materia de injusticias sociales. Incluso, el caso del joven asesinado Hans Pozo, caló muy hondo en su ser, recriminando las actitudes de la sociedad a la hora de proteger a personas tan carentes de afecto y herramientas sociales.
Un hombre católico, fiel representante del humanismo cristiano, Gonzalo Vial tenía una especial opinión sobre la vida, la iglesia y el humanismo cristiano, la que según sus palabras “considera y respeta a los otros humanismos”.
El libro “Gonzalo Vial, Un hombre que amó a Chile” de Ediciones USS, dará la oportunidad de conocer a un hombre que dividió su vocación de servicio en distintos ámbitos, pero siempre guiado por un solo objetivo; la justicia.