
El liceo Bicentenario Politécnico de Pitrufquén vivió una jornada marcada por la emoción, el orgullo y el talento de sus estudiantes durante la muestra anual de especialidades, instancia en la que los jóvenes fueron protagonistas al compartir con la comunidad todo lo aprendido a lo largo del año. La actividad reunió a familias, vecinos, autoridades y representantes de diversas instituciones, quienes pudieron apreciar el trabajo que refleja la esencia de la educación técnico-profesional: aprender haciendo.
El director del establecimiento, Carlos Sánchez, expresó su orgullo al ver el nivel de compromiso y creatividad de los estudiantes, quienes junto a sus profesores presentaron los resultados de meses de esfuerzo y dedicación. “Estoy tremendamente orgulloso de esta capacidad que tienen mis estudiantes para mostrar lo que hacen durante el año. Esto no es una exposición de cosas compradas, aquí está el trabajo real que ellos realizan día a día. Desde enfermería, contabilidad, electrónica y mecánica, hasta pintura y proyectos artísticos, todo lo que vemos refleja un aprendizaje auténtico y profundo”, señaló.
La muestra no solo dio cuenta de los conocimientos técnicos adquiridos, sino también de las habilidades blandas que los jóvenes han desarrollado, como la comunicación, el trabajo en equipo y la confianza en sí mismos. “Ellos no solo preparan materiales o proyectos, también aprenden a explicar, a comunicar con orgullo lo que saben. Se expresan con claridad, con seguridad y con conocimiento, demostrando lo que significa realmente aprender haciendo”, agregó el director.
El liceo trabaja bajo el modelo de educación dual, que combina la enseñanza en el aula con la práctica en empresas e instituciones colaboradoras, una metodología que según Sánchez “prepara no solo para una prueba, sino para la vida”. Este enfoque ha permitido que los estudiantes puedan aplicar sus aprendizajes en contextos reales, fortaleciendo su formación integral y su vinculación con la comunidad. “Nosotros educamos en comunidad. Este modelo dual nos conecta con más de 100 empresas y entidades como el hospital, el municipio y distintos servicios que acompañan a nuestros estudiantes. Es un orgullo ver cómo aplican en la práctica lo que aprenden en el liceo”, destacó.
Una de las experiencias más valiosas que el establecimiento ha impulsado este año es el taller de liderazgo, dirigido por el profesor Ricardo Figueroa junto a Denise, psicóloga del liceo. Este espacio busca potenciar las capacidades personales y relacionales de los jóvenes, permitiéndoles descubrir y desplegar su talento de forma positiva hacia la comunidad. “Formamos un grupo de 20 estudiantes, seleccionados no por sus notas o rendimiento, sino por ese algo especial que cada uno tiene. Hemos visto una transformación hermosa; chicos que antes eran tímidos o inseguros hoy se expresan con autenticidad, orgullo y confianza en sí mismos”, comentó Figueroa, quien destacó además el compromiso del establecimiento con el desarrollo integral de sus alumnos.
El taller ha generado un impacto tan significativo que continuará el próximo año, gracias al entusiasmo de los estudiantes y al apoyo de la dirección del liceo. “La idea es darle continuidad a este proceso, porque los mismos alumnos lo han pedido. Es emocionante verlos hoy participando en la muestra con tanta energía, mostrando quiénes son y lo que han aprendido. Esta es una experiencia de vida, no solo educativa”, añadió.
Con el cierre del año académico acercándose, el director del establecimiento entregó un mensaje de motivación a los jóvenes que pronto egresarán de la enseñanza media. “Si hay algo que siempre les decimos, es que la educación técnica no es terminal. Tienen que continuar estudiando, ya sea en una universidad o en un instituto. Mientras sigamos aprendiendo, nos mantenemos jóvenes. Muchos de nuestros exalumnos trabajan y estudian, y eso demuestra su compromiso con el futuro. Que no vean esto como un punto final, sino como el inicio de un nuevo camino”, expresó.
Antes de finalizar, Carlos Sánchez aprovechó la oportunidad para agradecer a todo el equipo que hace posible el trabajo del liceo; profesores, asistentes, personal administrativo y auxiliares. “Detrás de esta muestra hay un tremendo esfuerzo colectivo. Estoy muy orgulloso de mis estudiantes, pero también de mis profesores y de cada persona que contribuye día a día a que este proyecto educativo siga creciendo. Lo que hoy vemos aquí es el reflejo del trabajo de una comunidad comprometida con el aprendizaje, el respeto y los valores”, concluyó.


































