
En el marco de la plaza ciudadana realizada recientemente en la comuna, el colegio Madres Domínicas presentó un stand educativo dedicado a difundir el trabajo que estudiantes y docentes del área de ciencias han desarrollado durante el año en torno a la calidad del aire y los tipos de combustibles utilizados en la calefacción doméstica.
El proyecto, liderado por el profesor de ciencias Pablo Godoy, surge a raíz de la preocupante situación ambiental que enfrenta Pitrufquén, una de las ciudades que a comienzos de año fue catalogada entre las más contaminadas de Latinoamérica.
“Durante el año hemos estado trabajando en la calidad del aire, que ha sido un tema relevante para la comuna. Comenzamos haciendo ensayos con la academia y hoy mostramos seis tipos de combustibles para identificar cuáles son más eficientes y menos contaminantes”, explicó el docente.
Tras meses de trabajo y análisis, el equipo llegó a la conclusión de que la madera nativa, particularmente el hualle seco, sigue siendo la mejor opción para calefaccionar los hogares sin necesidad de realizar costosos cambios tecnológicos. “El hualle seco produce un residuo mucho menos contaminante que otros combustibles, incluso que el pellet, y es un recurso propio de nuestra zona. Lo importante es que se use bien seco, por eso recomendamos comprarlo durante el verano para tenerlo listo en abril”, señaló Godoy.
El docente advirtió además sobre los riesgos del uso masivo de eucalipto como leña, debido a su alto contenido de resina. “El monocultivo de eucalipto genera más hollín y ensucia más los caños, aumentando incluso el riesgo de incendios en las viviendas. Aunque a veces parece una opción más económica, no compensa los daños que provoca frente a la leña nativa”, agregó.
El proyecto cuenta con monitores de calidad del aire instalados en distintos puntos de la ciudad, como el frontis de la plaza, en el sector de la escuela Juan Bautista de Chesta y el municipio. Estos equipos han permitido medir el nivel de contaminación durante todo el año y comparar las variaciones entre un invierno y otro. “Nuestros registros muestran que este invierno fue peor que el anterior. Lo que muchas veces creemos que es neblina es en realidad smog, y eso nos preocupa, porque significa que seguimos respirando aire contaminado”, precisó el profesor.
La investigación ha sido también una valiosa experiencia educativa para los estudiantes, quienes se involucraron activamente en las mediciones, el análisis de los resultados y la difusión de los hallazgos a la comunidad. Durante la actividad en la plaza, los alumnos mostraron sus experimentos y explicaron al público los efectos de cada tipo de leña sobre el aire.
Bernardo, estudiante de séptimo básico, comentó que la experiencia le permitió comprender mejor la importancia de cuidar el entorno y compartir ese mensaje en su hogar. “Ha sido muy interesante. Me ha servido para aprender y para concientizar a otras personas. En mi casa también les he aconsejado usar combustibles más limpios, porque he visto los resultados”, relató el estudiante.
El profesor Pablo Godoy destacó finalmente que esta iniciativa busca educar y generar conciencia ambiental desde edades tempranas, uniendo la ciencia escolar con la responsabilidad ciudadana. “Queremos que las personas comprendan que elegir bien la leña puede marcar una gran diferencia. Optar por la leña seca y nativa es cuidar el aire que respiramos, nuestra salud y nuestro entorno”, concluyó.





























